La despedida de mi amiga Caye

Ya he hablado con la casa de Alba. Tengo que ultimar todos los detalles del evento y enviárselo urgentemente a Doña Cayetana. Me han dicho que no hay mucho tiempo que perder, así que....
Ah! que no os lo he dicho! Son los nervios. Tengo que preparar la despedida de soltera de la Duquesa de Alba! Ahí es nada, con la marcha que tiene esta mujer.

Lo primero y lo más rápido posible las invitaciones. Es dentro de dos días y para todas sus amigas el tiempo es oro. No sé...será cosa de la nobleza supongo. Tenemos que enviar varias de esas invitaciones a un par de residencias: "Las Magnolias" y "El descanso eterno", que es donde viven sus más intimas y finalmente se harán de manera tradicional: escritas en papel y dentro de un sobre.

En un primer momento pensé en algo más novedoso, más innovador. La idea era que la propia Duquesa grabase varios cds diciendo donde va a ser el evento, cual es el menú, etc, tratando de hacer así una invitación mucho más personal. Desechado. Me ha sido totalmente imposible encontrar ningún disco con horas suficientes para que la Doña se explicase como solo ella sabe, por lo que.. sobrecito e invitación de papel, como toda la vida.

Después de pasar horas hablando con ella, barajé la idea de organizar el típico fin de semana de despedida de soltera: un par de días de jolgorio en Benidorm. Pero en cuanto hice el recuento de gente y de edades la decisión más acertada ha sido hacerlo en casa. Imaginaros la estampa. En vez de un fin de semana de desenfreno y locura hubiese sido más bien un fin de semana de desenfriol y caderas rotas así que se hará todo en el palacete de turno: la cena, los regalos, el streaper....

Contrataremos un cocinero para que haga menús individuales. Cada persona un plato diferente, ya que hay que tener en cuenta los gustos de todas o más bien los consejos e indicaciones que les han dado sus médicos de cabecera. Pensar que unas no pueden echar una gota de sal a la comida y otras sólo pueden comer verduras o cosas a la plancha.

Y por supuesto, como medida de seguridad, todo en puré, bien pasadito. Aparte de las caderas no quiero que nadie se rompa un diente ni se atragante con un trozo de comida. O vete tú a saber si con el mismo diente.

Luego ella, super coqueta. Que si me pongo esto, que si me pongo lo otro. Hasta quería disfrazarse!
.-Que si, que si. Que me quiero disfrazar de pobre.
.-Cayetana, de verdad, no hace falta. Si eso ya está pasado de moda.
Porque no se viste usted normal, bueno..... como va siempre. Venga, como mucho.... la aliso el pelo vale?
La he convencido. Menos mal! Aunque hubiese sido todo un puntazo verla "vestida" de una manera distinta a la de todos los días.

El tema de los regalos se hará al revés. Siempre son los amigos los que le hacen un regalo a la persona de la despedida no? pues en esta ocasión será ella quien les de un detalle a todas. Hemos pensado en encargar unas tazas de porcelana, en las que imprimiremos el nombre de cada una de las invitadas junto con una foto de la homenajeada.
Va a ser una idea original pero sobre todo práctica. Parece que lo estoy viendo. Todas las tazas en las mesitas de noche con las dentaduras dentro y agradecidisimas (sus amigas, no las dentaduras) a la duquesa por el regalo: "je maja ed efta sdica ferda?".

¿Y que me decís del boy? Imaginaros un tiarrón de metro ochenta, musculoso, bien dotado. Morenazo, con los ojos verdes y azules a la vez. Y delante de él... el streaper! Ochenta y cinco tacos. Hace treinta años metro ochenta también. Ahora metro sesenta justo, justo y un precioso pelazo blanco que le sale desde la nuca. Y por supuesto igual de bien dotado que el morenazo. Dotado de una salud excelente para la edad que tiene claro.Es un amigo de Cayetana y había que contratarle sí o sí por lo que en este tema no ha habido discusión posible.

Para entenderlo mejor, la función del tiarrón vendría a ser lo que comúnmente denominaríamos como la del "tío pinza". Te colocas detrás de streapers de cierta edad y les estiras bien la piel para que les quede tersa, sin arrugas e intentando sacarles un poco de esa ya
perdida tableta de chocolate.
Al final hasta he inventado un nuevo trabajo que, en los tiempos que corren, no es una mala aportación no?

Y hasta aquí mi labor en la organización de esta despedida. El resto se lo dejo a la imaginación de la homenajeada, que para ligarse a un tío treinta años más joven que ella tenerla ya la tiene.

Yo ahora tengo que empezar con el próximo encargo, una boda .

Y os adelanto que otra vez tengo que coger un avión ( atiborrandome a pastillas de esas de las del miedo a volar ) y que seguramente este acontecimiento os resultará también bastante interesante, o al menos eso espero.La semana que viene lo comprobareis.

Hasta entonces, besos!!

Money.